Saturno es el planeta que representa todos los límites a los que no nos queda más remedio que adaptarnos y respetar. Es la disciplina, el esfuerzo, la seriedad y todo aquello que representa la autoridad, tanto externa como interna.
Nos hace buscar la aprobación social a través del acatamiento de las normas establecidas y nos recuerda que no es posible satisfacer todos nuestros deseos. Es por tanto el planeta a vencer para que la Ley de la Atracción funcione para nosotros.
El Signo y la Casa en donde tengamos a Saturno en nuestra Carta Natal nos dirá qué es lo más importante para nosotros pero en lo que, al mismo tiempo, nos sentimos inadecuados por lo que nos obligamos a trabajar buscando la excelencia y la perfección.
Con Saturno en Géminis hay un sentimiento de inseguridad y bloqueo con todo lo que tenga que ver con el conocimiento y la comunicación. Estas personas se vuelven muy exigentes con su formación que sienten que debe de ser académica y tener una utilidad clara. Son personas que piensan mucho antes de actuar.
Esa misma exigencia se la aplican a los demás llegando incluso a hacerles notar cuando no se expresan bien. Lo que hay de fondo es un miedo a no ser entendidos o no ser lo suficientemente inteligentes.
Es típico de niños que de pequeños o empezaron a hablar muy tarde o sufrieron algún problema como la tartamudez. También puede haber habido problemas de cualquier tipo con hermanos lo que le llevo a vivir soledad en su niñez.
Buena posición para las matemáticas.