Plutón en Casa 4 implica una conexión intensa con la familia y la figura materna, marcadas por traumas y transformación, buscando un renacer continuo.
El arquetipo de Plutón en astrología representa el cambio profundo y la transmutación, simbolizando la muerte de lo viejo y el renacimiento. Su energía provoca miedo a la muerte, recordándonos que vida y muerte son parte de un ciclo inevitable. Saca a la luz nuestra sombra, promoviendo transformaciones y revelaciones. Cuando se canaliza correctamente, se manifiesta como la inteligencia de un terapeuta o la dedicación de un investigador. Sin embargo, quienes tienen a Plutón prominente pueden sentirse omnipotentes o víctimas de su energía. También está asociado con la corrupción y el poder en la sombra, así como con las adicciones. La Casa de Plutón indica el área de obsesión en la vida.
Por otro lado, la Casa 4 en astrología representa el hogar, la familia y nuestras raíces. Es el fundamento emocional y físico del individuo, abarcando la infancia, la relación con los padres y las herencias familiares. También refleja nuestra sensación de seguridad interna y el lugar donde nos retiramos para reconectarnos con nuestro yo interior. Los planetas en esta casa muestran cómo creamos nuestro hogar, damos afecto y buscamos protección emocional.
Plutón en la Casa 4 de la Carta Natal implica una intensa conexión con las experiencias relacionadas con la madre, la familia, el origen y los lugares de pertenencia, trayendo regeneración y transformación a la vida. Los lugares a los que pertenecen estas personas los purifican y los llevan a un renacimiento continuo. Transforman su vida a través del linaje ancestral, absorbiendo la importancia de la purificación del espíritu.
Crecieron en un ambiente muy espiritual o en un entorno de mucha oscuridad, cargado de la sombra familiar, que podría incluir abusos físicos o emocionales. La figura materna puede haber sido destructiva o haber tenido enormes capacidades de transformación personal. La infancia de estas personas estuvo marcada por experiencias traumáticas, lo que hace difícil formar una familia debido a una memoria de sufrimiento y un miedo al abandono.
Es posible que en el resto de su vida sean personas normales, pero en su hogar experimenten una realidad diferente. Terminan las cosas abruptamente y pueden arrastrar complejos, traumas y problemas sin resolver desde la infancia. Para defenderse de estas emociones primitivas, pueden intentar amputar sus sentimientos más profundos y ejercer un rígido control sobre sí mismos. Sin embargo, siempre hay una sensación de que algo peligroso acecha en las profundidades y podría arrasar con ellos.
Se sienten vulnerables en el hogar, donde pueden volverse manipuladores y establecer o tener que cumplir una serie de reglas no escritas que generan tensión y miedo.
Pueden pasar por episodios de reorientación importantes, mediados por conmociones en la esfera doméstica o por el colapso total de la estructura familiar. Sin embargo, tienen la capacidad de renacer de los escombros gracias a sus profundos instintos de supervivencia.
Conoce al planeta Plutón
