La Luna en Casa 7 indica una búsqueda de seguridad emocional en las relaciones. Estas personas tienden a cuidar o buscar ser cuidadas por su pareja.
El arquetipo de la Luna en astrología representa nuestras necesidades emocionales y el sentido de pertenencia. Su posición en la Carta Natal indica cómo experimentamos la seguridad emocional y cómo nos relacionamos con los demás. Es responsable de las relaciones de apego y de los hábitos inconscientes que pueden sabotear nuestros objetivos. Aunque se asocia a la figura materna, es más bien una representación de nuestra percepción interna de la maternidad. Cada persona puede experimentar la energía lunar de manera diferente, lo que influye en sus reacciones emocionales. La Casa donde se encuentra la Luna señala las áreas en las que somos creativos y donde necesitamos desarrollar aptitudes para adaptarnos a la vida.
Por otro lado, la Casa 7 en la Carta Natal se centra en nuestras relaciones con los demás, incluyendo parejas, socios y rivales. Representa cómo nos complementamos con otros y la energía que intercambiamos en las relaciones. Esta casa abarca acuerdos, contratos, y temas de compromiso, como bodas y divorcios. Los planetas en la Casa 7 indican cómo nos relacionamos de manera directa y efectiva, y reflejan las proyecciones que hacemos sobre los demás, además de señalar potenciales carreras en áreas que implican trato humano.
La Luna en la Casa 7 de la Carta Natal tiene la capacidad de empatizar con los otros, identificando sus sentimientos y buscando ser acogida, protegida y tenida en cuenta. En el matrimonio, es común que estas personas cuiden a su cónyuge como si fuera su hijo o, por el contrario, busquen ser cuidados por su pareja.
Este emplazamiento lunar indica una tendencia a buscar seguridad en el otro, ya sea en la pareja, un amigo íntimo o cualquier relación significativa. Pueden llegar a adaptarse excesivamente a las necesidades del otro, lo que puede hacer que su identidad esté demasiado condicionada. En algunos casos, su pareja puede estar buscando una figura materna, lo que puede provocar problemas en la relación, especialmente en el ámbito sexual.
Buscan la seguridad que ofrece una familia a través del matrimonio, no estando particularmente interesados en ser individuos apartados. Los cambios emocionales vinculados a la relación son frecuentes, y la pareja puede ser inquieta, inestable o tener peculiaridades emocionales.
Estas personas tienden a asumir que los demás serán como ellos esperan y tienen una tendencia a querer cambiar o guiar a otras personas, haciéndolo de manera suave y sin imponer su voluntad. Esta posición lunar es muy frecuente en profesores, ya que permite conectar emocionalmente con los estudiantes y crear un ambiente acogedor y protector.
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