Quirón en Casa 4 refleja el conflicto entre la seguridad del hogar y la independencia, creando un bloqueo emocional relacionado con los padres.
El arquetipo de Quirón en astrología en la Carta Natal representa una herida emocional o psicológica profunda que todos llevamos, la cual nunca se cura del todo, pero que también se convierte en una fuente de sabiduría y sanación. Pero lo más importante de Quirón es que nos permite encontrar sentido y significado en nuestras experiencias a medida que aprendemos a gestionarlo. La casa en la que se encuentra Quirón muestra el área de la vida en la que sentimos esta herida, mientras que la casa opuesta puede revelar dónde podemos sanar a los demás.
Por otro lado, la Casa 4 en astrología representa el hogar, la familia y nuestras raíces. Es el fundamento emocional y físico del individuo, abarcando la infancia, la relación con los padres y las herencias familiares. También refleja nuestra sensación de seguridad interna y el lugar donde nos retiramos para reconectarnos con nuestro yo interior. Los planetas en esta casa muestran cómo creamos nuestro hogar, damos afecto y buscamos protección emocional.
Con Quirón en Casa 4, la tensión entre los padres, particularmente entre la madre y el padre, es clave. Una vez llegado a la adultez, representa el desafío de dejar la seguridad del hogar, el útero materno, para adentrarse en un mundo percibido como hostil. Este «tirón» del padre, que invita a salir de la zona de confort, se experimenta como un bloqueo emocional. El miedo al abandono o a la separación puede generar autosabotaje, ya que inconscientemente se rechaza la necesidad de independizarse. Aunque estas personas pueden tener una gran capacidad para ser padres por haber experimentado dificultades al dejar el hogar, también pueden sentir un profundo conflicto a la hora de lanzarse hacia el mundo exterior, ganar su propio sustento y abandonar esa zona de seguridad emocional.
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