La Casa 12 en Astrología es la casa de la espiritualidad y la aceptación incondicional, ligada a pesares, privaciones y tendencias ocultas. Es también la casa del sueño y de las actividades ocultas, marcando el anhelo de regresar al estado de unidad original. Esta casa está caracterizada por nebulosidad, confusión, empatía y compasión, así como por tendencias escapistas y la inmersión en gratificaciones sustitutas como el alcohol y las drogas.
Aquí se encuentran las energías que pueden tanto sostenernos como aniquilarnos. Esta casa también describe nuestras experiencias en hospitales, prisiones y otros lugares donde el individuo puede perder su poder y autonomía.
En términos de salud, la Casa 12 está vinculada a enfermedades crónicas. Tener muchos planetas en esta casa sugiere la necesidad de mucho descanso, y la falta de este puede llevar a la enfermedad.
Los planetas ubicados en la Casa 12 tienen una función que trasciende el ámbito personal, y deben servir a la humanidad en general. Esta también relacionada con el voluntariado, ya que aquí ponemos las necesidades de los demás por encima de las nuestras.
La Casa 12 abarca experiencias que están más allá de nuestro control y busca la paz del alma a través de la sumisión a una unidad superior, liberándose de los fantasmas del pasado. También presenta el dilema de la doble ligadura existencial: anhelar la totalidad y al mismo tiempo temerla y resistirse a ella. Es la casa del auto boicot y la auto destrucción.
Se pueden seguir varias estrategias para reconectarse con la unidad: a través del sexo y el amor, buscando aceptación; a través de posesiones, poder y prestigio, extendiendo la esfera de influencia; y a través de alcohol y drogas, derribando fronteras y flexibilizando rigideces.
En Astrología Moderna la Casa 12 esta relacionada con el signo de Piscis.