El sextil Marte-Plutón proporciona resiliencia, pragmatismo y gran energía. Ideal para aprender a superar desafíos y alcanzar objetivos y ambiciones difíciles.
El sextil es de la naturaleza de Aries – Géminis por lo que une planetas de elementos compatibles. Representan habilidades y talentos innatos que pueden desarrollarse con un pequeño esfuerzo. Se dice que son aspectos de oportunidad porque a diferencia de los trígonos, es necesario hacer un pequeño esfuerzo para que la relación entre esos dos planetas sea fluida.
Marte representa nuestro valor para enfrentarnos a aquellas cosas que nos dan miedo. Es la energía que utilizamos para evitar el estrés y la tensiones de la vida diaria. Es la voluntad de supervivencia. Los aspectos, casa y signo indicarán que tipo de herramientas utilizaremos para defendernos, así como lo hábiles y capacitados que podemos sentirnos para utilizarlas ante una situación determinada. También es la cólera, la pasión por las cosas y el egoísmo. Marte estimulará cualquier planeta con el entre el contacto mostrando la persona gran fuerza en ese ámbito. Marte siempre tiene que ser analizado junto a Venus.
Plutón, cómo todos los planetas transpersonales, simboliza una energía impersonal y ante la que no queda más remedio que rendirse. Plutón representa el poder absoluto, la muerte y resurrección, la destrucción para comenzar desde cero. También es la lucha más descarnada por la supervivencia. La Casa que ocupe representa el área de la vida en donde no quedará más remedio que reinventarse y donde se vivirán situaciones traumáticas. En aspecto, provoca que se viva la energía del otro planeta como algo amenazante, a vida o muerte.
El sextil Marte-Plutón combina la energía resolutiva de Marte con la resiliencia profunda de Plutón, generando un aspecto que otorga pragmatismo, capacidad para superar obstáculos y una gestión estratégica de situaciones difíciles. A diferencia del trígono, el sextil implica un proceso consciente de aprendizaje, donde el poder personal se va descubriendo y refinando con el tiempo.
Este aspecto suele indicar una necesidad temprana de enfrentar desafíos para alcanzar deseos y ambiciones. Las dificultades iniciales forjan una gran capacidad de resistencia y una determinación inquebrantable para controlar la propia vida y tomar decisiones autónomas. El sextil dota de una fuerza tranquila que, aunque no siempre visible para los demás, se manifiesta en su habilidad para llevar adelante proyectos complejos con éxito.
A pesar de sus beneficios, existe el riesgo de caer en una trampa de autocomplacencia, creyendo que el poder es ilimitado. Esto puede llevar a actuar sin considerar las sensibilidades ajenas o a asumir una carga excesiva sin pedir ayuda. Aprender a dosificar el esfuerzo y escuchar a quienes rodean es clave para un uso equilibrado de este aspecto.
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