La conjunción Sol-Marte da energía y determinación, pero requiere equilibrio para evitar la impulsividad y aprender a escuchar sin ver las críticas como ataques.
La conjunción es un aspecto astrológico muy energético de la naturaleza de Aries – Aries, por lo que nos empuja a la acción. Se produce cuando dos planetas se encuentran lo suficientemente juntos en la eclíptica como para actuar juntos. Cuanto más cercanos estén los planetas, más fuerte será su efecto. La compatibilidad de la naturaleza de los planetas en conjunción será clave para saber si trabajan a favor o en contra del resto de la Carta Natal.
El Sol representa nuestro sentido de identidad, aquello que consideramos importante y de lo que nos sentimos orgullosos. Sus cualidades representan a la persona con la que nos identificamos. Todos los planetas que aspecten al Sol influirán en como nos vemos. El Sol esta centrado en el propósito de nuestras vidas, así como en todas aquellas pruebas con las que nos iremos encontrando en el camino, por lo tanto la información que hay en el Sol y sus aspectos serán clave para identificar nuestro destino.
Marte representa el valor para enfrentarnos a aquellas cosas que nos dan miedo. Es la energía que utilizamos para evitar el estrés y las tensiones de la vida diaria. Es la voluntad de supervivencia. Los aspectos, casa y signo indicarán que tipo de herramientas utilizaremos para defendernos, así como lo hábiles y capacitados que podemos sentirnos para utilizarlas ante una situación determinada. También es la cólera, la pasión por las cosas y el egoísmo. Marte estimulará cualquier planeta con el entre el contacto mostrando la persona gran fuerza en ese ámbito. Marte siempre tiene que ser analizado junto a Venus.
La conjunción entre el Sol y Marte representa una alineación total entre la voluntad de ser uno mismo y la capacidad de afirmarse en el mundo. Este aspecto da una energía intensa y una autoexpresión directa, sin filtros ni concesiones. Las personas con esta conjunción no sienten la necesidad de parecerse a los demás, salvo en casos donde la conjunción ocurre en signos como Libra o Acuario o en casas como la VII o la XI. Su actitud refleja la idea de «ser uno mismo sin importar la opinión ajena».
Esta conjunción otorga un gran espíritu competitivo y una fuerte determinación. Quienes poseen este aspecto tienden a ir directamente tras lo que desean, evitando rodeos y pasando a la acción inmediata. Su enfoque es agresivo y decidido, con una gran resistencia ante obstáculos y normas que puedan interponerse en su camino. Son adversarios formidables en cualquier tipo de competencia, pues su impulso natural es ganar y afirmarse en cualquier situación.
La expresión de esta energía varía según el elemento del signo en el que se ubique la conjunción. En signos de Aire, la competencia se manifiesta en el plano mental e intelectual; en Fuego, a través de la actividad física; en Tierra, mediante el control y dominio del mundo material; y en Agua, en una fuerte carga emocional enfocada en la autoexpresión. Asimismo, en signos fijos la perseverancia y tenacidad son rasgos predominantes, en cardinales prima la intensidad y el deseo de conquista, mientras que en mutables puede haber un cambio de objetivos si la persona pierde el interés.
Independientemente del signo o la casa, este aspecto necesita una vía de escape para la enorme energía que genera. Estas personas no toleran la pasividad, el conformismo ni la sumisión a normas sociales restrictivas. Es fundamental que encuentren actividades que les permitan canalizar su impulso natural de acción, ya que de lo contrario pueden sentir que el mundo está en su contra o desarrollar actitudes destructivas y depresivas.
Ya desde la infancia, estas personas requieren comprensión por parte de su entorno, ya que su intensidad puede ser difícil de gestionar. Además, deben aprender a escuchar a los demás, un desafío importante para ellos. Su tendencia a actuar con rapidez y a creer que ya han llegado a sus propias conclusiones los hace impacientes con los otros, percibiendo las críticas como ataques personales. Para equilibrar este aspecto, es vital desarrollar la paciencia, aprender a recibir opiniones y aceptar que no todos comparten su nivel de energía. También es importante que aprendan a aprovechar los momentos de descanso y a «recargar las pilas» para no desgastarse.
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